Cómo puedo encontrar trabajo en España
La búsqueda de empleo siempre es una experiencia agridulce. Por un lado, puede resultarnos emocionante la aventura de explorar las diferentes vías profesionales que nos depara el futuro. Por otro, el tedioso proceso de conectar con posibles empleadores y esperar sus respuestas a menudo deriva en frustración y desesperación o dudas sobre nuestra vocación profesional. Pero con paciencia, un poco de ingenio y una buena estrategia, algo saldrá. Y algo bueno.
Algunas de las recomendaciones que hacen los expertos en recursos humanos para quienes están al acecho de nuevas oportunidades laborales incluyen por los siguientes puntos:
- Crearse una marca personal: diferenciarse del resto. Sobre todo en aquellos sectores donde hay un exceso de oferta de mano de obra, lo importante es resaltar entre la multitud. Cada uno de nosotros es único y puede aportar algo que la mayoría de personas no puede. Sólo hay que encontrar esa cualidad exclusiva y hacerla destacar. Hacer una suerte de análisis DAFO de uno mismo, con las debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades, puede ayudar a tener claro qué subrayar de nuestras capacidades.
- Diseñar un plan. Una vez sabemos cómo somos y en qué sector nos queremos centrar, no está de más fijarse objetivos a corto y largo plazo, e incluso crear un calendario. Sin embargo, es recomendable mantener cierta flexibilidad en este punto, tanto por los posibles cambios de intereses, como por fracasos o caminos alternativos para llegar a nuestra meta.
- Gestionar correctamente el currículum. Lo ideal es personalizar el currículum de forma que se adapte a cada oferta. Con la información a mano de qué pide el puesto concreto que queremos solicitar, debemos amoldar nuestro CV para que satisfaga, sin salirnos de los márgenes de la verdad, las necesidades de la oferta.
- Tener visibilidad. Ya sabemos qué tenemos y qué queremos. Ahora necesitamos darlo (darnos) a conocer: saber “vendernos”. Los contactos son oro en cualquier sector e industria, y por ello necesitaremos fortalecer nuestra agenda de teléfonos y correos. Para ello habrá que acudir a eventos de networking, actos, charlas o cualquier lugar donde podamos encontrarnos con las personas que nos pueden ser útiles a la hora de encontrar trabajo. Conviene mantener la mente muy abierta, pues nunca se sabe dónde vamos a hacer nuevas conexiones. También en el terreno online es cada vez más importante ganar visibilidad. Las redes sociales son un buen escaparate de nuestro trabajo y nuestras habilidades, y una forma directa de conectar con profesionales. Son muy útiles espacios como LinkedIn, plataformas de empleo o redes profesionales del sector.
- Realizar una muy buena entrevista. Como todo, es más fácil decirlo que hacerlo. En una entrevista uno se pone nervioso, contesta mal a preguntas sencillas que en cualquier otro momento habría bordado e incluso puede llegar a decir cosas que están fuera de lugar. Pero esto se puede evitar. Cuando uno se prepara bien una entrevista y lo tiene todo bajo control existen las probabilidades de perder la calma se reducen. La clave es estudiar bien a fondo a la empresa antes de acudir a la cita. Pero no sólo hay que conocer la historia de la compañía donde se quiere trabajar. Conviene saberlo todo sobre la industria, así como sobre el trabajo de la empresa y sus proyectos actuales; así como sobre el rol en concreto que se pretende desarrollar. También hay que re-estudiarse a uno mismo (paso 1), de forma que podamos expresar lo que creemos podemos aportar a la compañía y poner en valor nuestras capacidades, sin caer en la soberbia.
Un consejo de los especialistas es la naturalidad. La empatía con el entrevistador suele ser crucial, y ésta rara vez se consigue si uno no está siendo fiel a sí mismo. No obstante, no importa cuál sea el estado de ánimo en este punto de la búsqueda, hay que mostrarse muy motivado, y con especial interés en el puesto que se ofrece. Respecto al dinero, es un tema espinoso, pero tampoco se ha de evitar. Lo idóneo es conocer de antemano lo que se paga por ese tipo de puesto en el sector y a profesionales con un nivel de experiencia similar.
Todos estos consejos no servirían de nada si no se aplicaran, durante todo el proceso de búsqueda, dosis constantes de perseverancia. ¡La paciencia es una virtud y la búsqueda de empleo la requiere!