Pon un diseñador sostenible en tu empresa
La economía circular se ha convertido en el nuevo paradigma del cambio que necesita la sociedad y el planeta para virar hacia esa sostenibilidad hacia la que todo el mundo está de acuerdo que debemos dirigirnos a nivel global.
No es más que lograr reducir nuestros residuos, dejando de derrochar los recursos finitos que nos ofrece la naturaleza tratando de dar cuantas vidas sean posibles a las materias primas que conseguimos tras los procesos de recogida, selección, reutilización, o reciclaje de los residuos.
En todo este ciclo, la figura del diseñador sostenible o experto en ecodiseño es fundamental y es una profesión con potencial que en una economía como la verde, que no va a hacer más que crecer en los próximo años, tiene un gran futuro. Las empresas que han aplicado iniciativas de ecodiseño en los últimos años en España son más cada día y han reconocido el enorme beneficio que les ha traído sumarse a esta tendencia.
Funciones del diseñador sostenible
El diseño sostenible o ecodiseño trata de crear un producto de manera que su ciclo de vida sea tan largo como sea posible, o que tras un uso pueda ser luego utilizado para otro totalmente distinto, dando segundos usos a materiales reciclables. Por ejemplo, residuos de botellas de plástico, botes de detergente, champú, gel, bolsas de patatas, tapas y tapones de plástico, bolsas de plástico (excepto las bolsas de basura), tarrinas y tapas de yogur o briks pueden convertirse en cajas de zapatos, muebles, losetas, vallas, tarimas, rotuladores, perchas, bolsos, complementos, ropa, nuevos envases, bolsas, zapatos o piezas para electrodomésticos y coches, por ejemplo.
Aunque se aplican en gran parte a la arquitectura sostenible es impensable no hablar de diseño ecológico sin mencionar los principios de Hannover que, aunque parezca mentira, ya fueron definidos hace veinte años, por William McDonough y el químico Michael Braungart. Son los siguientes:
- La humanidad y la naturaleza deben coexistir en condiciones saludables, solidarias, diversas y sostenibles.
- El diseño humano interactúa con el mundo natural y depende de él. La acción humana tiene sus consecuencias sobre la naturaleza. Son interdependientes. Es necesario aumentar el cuidado en el diseño, hasta reconocer sus efectos incluso en la distancia.
- Hay que considerar todos los aspectos de los asentamientos humanos, incluyendo la comunidad, la vivienda, la industria y el comercio, en términos de conexiones existentes y cambiantes entre la conciencia espiritual y material.
- Es fundamental aceptar la responsabilidad de las consecuencias, derivadas de las decisiones en diseño, sobre el bienestar humano; la viabilidad de los sistemas naturales y su derecho a coexistir.
- Hay que crear objetos de valor seguro a largo plazo. No cargar a las futuras generaciones con la responsabilidad de un mantenimiento derivado de la creación descuidada de productos.
- Eliminar el concepto de residuo. Evaluar y optimizar el ciclo de vida completo de productos y procesos, evitar desperdicios.
- El diseño humano debe incorporar la energía eficientemente y de forma segua.
- Entender las limitaciones del diseño. Tratar la naturaleza como modelo y no como un inconveniente que controlar.
- Re-establecer una y otra vez la relación entre los procesos naturales y la actividad humana.