Estos son los diferentes cheques guardería a los que puedes acceder
La conciliación se ha convertido en un gran reto en el que las empresas jugarán un papel fundamental, pero al margen de las fórmulas que se adopten para conciliar la vida personal y profesional, lo cierto es que el cuidado de los hijos implica una preocupación y unos costes que no todas las familias pueden asumir sin ver afectada su economía. Los cheques guardería surgen para hacer esta etapa más fácil para las familias y pueden llegar en forma de beca de educación infantil de carácter autonómico, de deducción fiscal como ayuda a la maternidad, o en forma de retribución flexible adoptada por las empresas.
Cheque guardería como beca de educación infantil
El cheque guardería es una subvención que trata de ayudar a las familias con la escolarización de sus hijos en los primeros años de educación infantil. Se trata de una subvención de carácter autonómico, disponible en la mayoría de comunidades, aunque en cada una de ellas cuenta con diferentes importes.
En algunos casos, como Andalucía, la ayuda será una bonificación sobre el precio que tienen que abonar las familias, en función de su renta y del número de miembros de la unidad familiar (en algunos casos puede llegar al 100%). En otros, como el de Aragón, la prestación funciona de manera indirecta, y son los centros los que la reciben. En Madrid la ayuda (entre 100 y 350€) se dirige a familias que cuya renta per cápita familiar no supere los 35.913€, cuando el centro sea de titularidad privada y autorizado por la comunidad. En Baleares se recurre a un sistema de puntos para establecer el porcentaje de ayuda. En Murcia la ayuda es de hasta 1.000€ anuales y se da prioridad a las rentas más bajas. Además, encontramos comunidades en las que la educación infantil es gratuita: en Castilla y León entre 1 y 3 años, en la Comunidad Valenciana en la franja de 2 a 3, en el País Vasco de 0 a 3 años y en Galicia, de 0 a 3 años, para los segundos hijos y posteriores.
Cheque guardería como deducción fiscal
Con el objetivo de facilitar la reinserción de las mujeres en el mercado laboral tras la maternidad surge una desgravación de hasta 1.200 euros anuales por hijo en la Declaración de la Renta. Esta ayuda a la maternidad no requiere solicitud, sino que se aplicará automáticamente a las madres con hijos de hasta 3 años, que en el momento del nacimiento de su hijo o después de su baja de maternidad estuvieran dadas de alta en la seguridad social en el régimen correspondiente o recibieran prestaciones contributivas o asistenciales (en el caso de adopción la desgravación será posible desde el momento de la inscripción del hijo en el Registro Civil. Cuando se trate de acogidas la ayuda será accesible desde el momento de su resolución jurídica y en ambos casos tendrá una duración de tres años, independientemente de la edad del menor).
A esta deducción se suma el “Incremento a la deducción por maternidad”, de hasta 1.000€ anuales, dirigida a madres (trabajadoras por cuenta ajena o propia y dadas de alta en la seguridad Social) con hijos entre 0 y 3 años escolarizados en guarderías o centros de Educación Infantil autorizados. Para acceder a esta deducción es necesario que el centro educativo sea quien informe a Hacienda mediante el modelo 233.
Cheque guardería como retribución flexible
Algunas empresas, conscientes del coste que la guardería tiene en la economía de sus empleados, cuentan con un cheque guardería propio que se ofrece a los empleados a modo de retribución flexible (en Ecoembes, por ejemplo, recurrimos a ella para cubrir las dietas de los miembros de la organización), ya sea mediante un cheque o tarjeta, o introduciéndolo directamente en la nómina del trabajador (ya que se trata de una ayuda accesible tanto a madres como a padres). Dicha ayuda en principio está exenta de tributar en el IRPF, aunque más adelante veremos que este aspecto, a efectos prácticos, contempla algunos matices.
En lo que refiere a la organización, ofrecer a los empleados este tipo de beneficio es positivo ya que, al margen de que esta inversión se traduce en un mejor rendimiento, productividad y clima laboral, estos cheques son desgravables al 100% en el impuesto de sociedades.
Compatibilizar las ayudas
El cheque guardería que ofrecen las Comunidades Autónomas a modo de beca es compatible con las otras dos fórmulas, pero dado que tanto el estatal como el planteado por las empresas contempla una deducción fiscal para los beneficiarios, en principio no sería posible beneficiarse de ambas deducciones.
En caso de que queramos acceder a todos los cheques guardería, la fórmula para combinarlos es la que ya han puesto en marcha algunas empresas: tributar una parte del cheque guardería (la equivalente al importe máximo de la deducción: 83,33€ al mes) para que el trabajador pueda aplicar la deducción (ya que se considera esta parte del cheque como medio de pago), y considerar el resto del importe del cheque como rendimiento de trabajo exento (se trataría como retribución en especie). De esta manera se elimina la incompatibilidad, aunque es necesario que la empresa haga una actualización del contrato en la que se establezca claramente la parte del cheque que se considera medio de pago (retribución dineraria sujeta a IRPF) y la parte que se considera retribución en especie exenta.