Cuando tus empleados hablan de ti: employer branding
Cuando pensamos en la reputación de una empresa, normalmente nos vienen a la cabeza sus valores, el ámbito en el que actúa o su política de responsabilidad social corporativa, pero solemos pasar por alto el hecho de que su reputación interna incide en la externa. El equipo humano de cualquier organización contribuye a ensalzar o degradar su reputación con mayor credibilidad que cualquier campaña de marketing. Con el objetivo de cuidar esta faceta reputacional y mejorar el clima laboral surge el employer branding.
Cuando tus empleados hablan de ti
No importa el esfuerzo que una empresa dedique a cuidar su imagen, cuando se trata de cuidar la reputación es imprescindible realizar un trabajo integral que comenzará en el ámbito interno.
Cuando hablamos de employer branding nos referimos a la dimensión reputacional de la empresa como empleadora, que influirá en la percepción de los trabajadores de la compañía, la de posibles candidatos, y trascenderá a clientes, proveedores, competidores, etc.
Al margen de que la empresa genere un producto o servicio de calidad, el objetivo del employer branding es que quien trabaje en ella pueda reportar una experiencia positiva a todos los niveles: valores, cultura empresarial, ambiente laboral, oportunidades de conciliación, etc.
El gran valor del employer branding es que, además de mejorar la reputación de la empresa, contribuye a retener y atraer el talento. Debemos tener en cuenta que la reputación no se conforma exclusivamente a partir de la comunicación que una empresa emite, sino de lo que realmente es y hace, y el employer branding la define en lo referente a la experiencia profesional que ofrece.
Cómo puede mejorar la reputación el employer branding
El employer branding existe, tanto si la empresa trabaja en él de manera consciente como si no, pero dado que tiene un impacto directo en la reputación de la empresa es importante cuidar que sea positivo y, una vez logrado este objetivo, contribuir a impulsar la información que mejora la reputación de la organización.
A través del employer branding se puede modificar la percepción que hay acerca de una empresa, lo que contribuirá a atraer talento, reducir los costes de contratación y disminuir la rotación de empleados. Internet ha dado lugar a que la información sea muy accesible, y cualquier candidato puede saber cómo es la experiencia laboral en la empresa a la que se postula si realiza las búsquedas necesarias. Según un estudio realizado por CareerArc, el 87% de los candidatos a un puesto de trabajo tiene en cuenta el employer branding antes de presentarse a una oferta de empleo.
Por tanto, es imprescindible trabajar en el tipo de empresa que se quiere ofrecer, después, de manera natural los empleados se convertirán en embajadores. Teniendo en cuenta que su testimonio es fruto de la experiencia, este es el canal con mayor credibilidad con el que puede contar una empresa.
Cómo trabajar el employer branding
El punto de partida para empezar a trabajar en el employer branding es la cultura corporativa. Transmitir los valores y trabajar para que arraiguen contribuye a establecer el marco de trabajo común a todos los miembros del equipo, lo que reduce el riesgo de conductas disonantes.
A continuación, debemos atender a las necesidades de los trabajadores: entender de qué manera podemos mejorar su calidad de vida para mejorar su compromiso con el trabajo. Un trabajador feliz y comprometido es productivo, por lo que en esta línea sólo vamos a encontrar ventajas. Esto puede significar introducir teletrabajo, flexibilidad horaria, beneficios sociales… En Ecoembes, tomamos este punto como una prioridad y, para mantenernos siempre en la vanguardia, prestamos especial atención a las pautas de Great Place to Work.
Por supuesto, será necesario trabajar al mismo tiempo en una buena estrategia de comunicación interna, que permita transmitir con claridad objetivos y nuevos compromisos de la empresa, pero que también facilite un flujo bidireccional de información.
Una vez tenemos esta estructura firmemente asentada, podremos pasar a la comunicación externa. En este sentido el objetivo ha de ser transmitir cómo es la experiencia de trabajar en la empresa, algo que puede alcanzar redes sociales (perfectas para mostrar el día a día de la compañía y el clima laboral), diferentes formatos de storytelling, ofertas de empleo, etc.
El employer branding ha de ser, ante todo, veraz. Tal como planteábamos anteriormente, es creíble porque se basa, no en una información oficial, sino en un testimonio que parte de la experiencia. Por eso es esencial que las organizaciones comuniquen medidas y acciones que sean reales: mostrar lo que somos, y no lo que queremos ser.