Aprender a emprender
Hay personas que, casi de manera intuitiva, constantemente están imaginando nuevos proyectos empresariales. Son gente que encuentra oportunidades de negocio en cualquier situación y tiene la iniciativa necesaria para desarrollarlos. Se les conoce como emprendedores o emprendedoras natas, pues parece que llevan el emprendimiento en la sangre y están habituados a aprender a emprender.
Sin embargo, hay formas de convertirse en una de estas personas. Uno puede entrenarse a sí mismo, cuestionar sus límites y adoptar una actitud determinada para ganar poco a poco una mentalidad puramente emprendedora. Y sobre todo una cosa fundamental para un emprendedor es, aunque parezca una paradoja, aprender a desaprender.
Las cualidades de un emprendedor
Hay cualidades que se pueden ejercitar para alcanzar este objetivo. Éstas son, de acuerdo con los especialistas:
- la pasión
- la motivación
- la creatividad
- el ingenio
- el pensamiento lateral
- la capacidad para mantener la mente abierta y pensar “fuera de la caja”
- el razonamiento crítico
- la capacidad observadora
- el pragmatismo
- el liderazgo
- la perseverancia
Y es que no basta con tener buenas ideas, sino que además se han de llevar a cabo, utilizando con el mayor ingenio posible los pocos recursos de los que uno suele disponer al inicio de un proyecto. Algunos expertos indican que lanzarse con una apuesta arriesgada es más fácil cuando no hay tanto en juego, por lo que cuanto menos se invierta y más se optimice esa inversión, mayor será la flexibilidad para adaptarse a situaciones cambiantes.
Carlos Barrabés, el pionero en comercio electrónico en España que se ha convertido en una suerte de gurú del emprendimiento, recalca con frecuencia la importancia de los emprendedores en los nuevos tiempos. Tal como afirmó en una entrevista al diario Expansión, “la evolución del mundo está en manos de los emprendedores. Ellos crearán los puestos de trabajo del futuro”. Barrabés destacó también la importancia de la pasión por el trabajo: “Tengo la suerte de trabajar en algo que me llena y de lo que puedo vivir. No niego que me ha ido bien, pero para mí la prioridad no es el dinero. A mí lo que me apasiona es trabajar en un proyecto, transformar las cosas”.
Por su parte, Caterina Fake, otra famosa emprendedora de la era digital, fundadora de empresas como Flickr o Hunch, valoró la importancia de mantener la mente abierta permanentemente, incluso después de una primera experiencia exitosa, como en su caso. En una entrevista a entrepreneur.com, Fake aseveró: “La gente tiende a ser más cautelosa a la hora de tomar riesgos la segunda vez. No hay que caer en esa depresión de segundo año. Si se ha construido una empresa exitosa la primera vez, es realmente importante no caer en la trampa de dormirse en los laureles y hacer lo mismo la próxima vez. Es entrar en lo desconocido lo que te permite crear algo fresco, nuevo e innovador”.
Ecoembes emprende
Programas de intraemprendimiento como IDEA o Ecoembes Innova tratan de explotar el potencial emprendedor de los empleados y empleadas de la organización, apoyándoles en el proceso de desarrollo empresarial de sus ideas y acompañándoles con formación continua y asesoría en todo momento.
Estas iniciativas fomentan la creatividad de los trabajadores e impulsan las ideas que éstos puedan tener en el marco de la economía circular, además de favorecer la oportunidad de que los empleados crezcan profesionalmente y de que expongan sus cualidades ante el comité directivo de la empresa.
Además, sus sugerencias se enmarcan en las líneas de innovación que Ecoembes trabaja simultáneamente: soluciones orientadas a los ciudadanos a fin de facilitarles el proceso de reciclado (mejora en la separación en origen, por ejemplo), a la creación de nuevos materiales o diseños que permiten fabricar envases más reciclables (ecodiseño), o a la mejora de la recogida selectiva, entre otras cuestiones.